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miércoles, 15 de octubre de 2014

EL TIEMPO




El tiempo es como un río. No puedes tocar la misma agua dos veces, porque el flujo que pasó nunca pasará otra vez. Disfruta cada momento de la vida... Tómate el tiempo para vivir.
Si vives diciendo lo ocupado que estás, entonces tú nunca serás libre.
Si vives diciendo que no tienes tiempo, entonces tú nunca tendrás tiempo.
Si vives diciendo que lo harás mañana, tu mañana nunca llegará.
Disfruta cada momento de la vida... Si no usas tu tiempo durante el día, tú eres el que pierdes. No puedes dar marcha atrás.
Atesora cada momento que vivas; y ese tesoro tendrá mucho más valor si lo compartes con alguien especial, lo suficientemente especial como para dedicarle tu tiempo... y recuerda que el tiempo no espera por nadie.




 





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domingo, 12 de octubre de 2014

EL AMOR VENCE AL ODIO


La regla de oro de las grandes religiones es el amor al prójimo. En el libro de Tobías el anciano ciego, sintiendo cercana la muerte, dio preciosos consejos a su hijo. Entre ellos se destaca: “No hagas a nadie lo que no te agrada a ti”. Norma fundamental y obvia, pero tantas veces transgredida por egoísmo o inconsciencia.

“No tenemos, ni queremos tener otros medios para vencerlos que el amor. Jamás emplearemos contra ustedes la violencia. Por medio del amor, a ustedes, que son nuestros enemigos, los convertiremos en amigos. A la capacidad de ustedes de hacernos sufrir, opondremos la nuestra de soportar el sufrimiento. Póngannos en la cárcel, y los seguiremos amando. Quemen nuestras cosechas, y los seguiremos amando. Aterroricen a nuestros hijos, y los seguiremos amando. Envíennos gente que nos apalee, y los seguiremos amando. Llegará un día en que se avergonzarán de su propia violencia. En ese día nos darán libertad y lograrán la de ustedes, porque se habrán librado del odio. En ese día se alcanzará una doble victoria”. Martin Luther. King.

“En una humanidad dividida por guerras y discordias, pidamos al Señor, que las luchas se apacigüen y crezca el deseo de la paz, que los enemigos vuelvan a la amistad, que los adversarios se den la mano y los pueblos busquen la unión, que el perdón venza al odio y la indulgencia a la venganza”. La paz, recuerda, comienza con una sonrisa.

 P. Natalio