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viernes, 18 de junio de 2010

" No se preocupen..


...de cómo atraer a las multitudes. Estén seguros: si siguen a Jesús la gente los seguirá."

F.XN. Van Thuan


En tiempos tan duros en los que la Iglesia pasa por una purificación, en los que todo se cuestiona y ensucia, hay en mi corazón una gran esperanza.

Es innegable que hay crímenes aberrantes, que no pueden pasar inadvertidos o tapados.

Es innegable que que hubo quienes con la buena intención de guardar a la Iglesia del escándalo, la perjudicaron con su silencio.

Pero también es innegable que no puede cuestionarse la grandeza de la maternidad o la paternidad, porque haya padres y madres que no cuiden, abandonen y hasta atenten contra la vida de sus hijos. Tampoco puede cuestionarse el valor del matrimonio como vínculo sagrado entre hombre y mujer, para la formación de la familia, porque haya quienes pretendan desvalorizarlo o desnaturalizarlo. Y tampoco puede cuestionarse el valor del sacerdocio porque haya lobos que, disfrazados de ovejas, enfermos de la más grave enfermedad mental, hayan deshonrado su ministerio, sus vidas y otras vidas inocentes.

Finalmente es innegable que desde sus comienzos la Iglesia fue perseguida y hoy se agrega la monumental industria del juicio de sus enemigos, que pueden usar los medios, para volcar la opinión de las masas pretendidamente "informadas" a sus sucios intereses.

Pero estas verdades tan dolorosas, porque SOY, SOMOS Iglesia, vuelvo a repetir, siembran en mi corazón una gran esperanza.

Esperanza de qué?¿ Acaso éstos son buenos tiempos?

Mi única esperanza es saber que la ESPOSA de Cristo, su cuerpo místico, sigue los pasos de su Divina Cabeza. La Iglesia nació pobre, como Jesús.

Regada con la sangre de los mártires( como los santos inocentes en la época de su nacimiento). "Creció en sabiduría y gracia delante de Dios y de los hombres" como Jesús. Finalmente traicionada por los Judas de hoy, por los lobos disfrazados de ovejas, que manchan su nombre.

¡Dónde terminó el viernes Santo? En el Glorioso domingo.

¿Dónde terminará este viernes santo eclesial?En el glorioso día donde surja la luz de una Iglesia purificada, pobre y viva como su cabeza.

Hoy nos toca la fidelidad, el silencio, el dolor y la presencia al pie de la cruz.

Como María, Juan y algunas pocas mujeres.

Mañana será nuestra Pascua.



Cristina